EGUZKI ANTE LAS AYUDAS A LA FORMACIÓN E INFORMACIÓN SOBRE SEGURIDAD NUCLEAR, EXIGE EL CIERRE INMEDIATO DE GAROÑA

Es la sociedad vasca la que exige al Gobierno Español que atienda a la demanda netamente mayoritaria cierre Garoña de forma inmediata, y dentro de la formación e información de la población se garantice con el cierre de Garoña el fin del riesgo para la población En el día de hoy hemos tenido conocimiento de la publicación en el BOE de la Resolución de 4 de julio de 2012, del Consejo de Seguridad Nuclear, por la que se conceden para el año 2012, ayudas para la realización de actividades de formación, información y divulgación relacionadas con la seguridad nuclear y la protección radiológica, convocadas por Resolución de 15 de febrero de 2012. En la misma se refiere a actividades de formación, información y divulgación relacionadas con la seguridad nulcear, algo que el Gobierno de Madrid ni forma ni informa ni respeta la seguridad de la población con la prolongación de la vida de la central de Garoña, una central con más de 40 años de vida, que pone en jaque la seguridad de su entorno. Esta central nuclear, además del peligro que esta forma de producción entraña, tiene algunos elementos de sangrante preocupación y temor: las grietas del barrilete, de las barras de penetración, de los manguitos; los problemas de corrosión intragranular, en las tuberías del circuito de refrigeración... Todas ellas sumadas son un agravante de su ya superada fecha de caducidad. Por todo ello, Eguzki denuncia que esta prórroga acordada por el gobierno de Rajoy acatada por los gobiernantes alaveses De Andres y Maroto con el lamento para quedar bien de cara a la población pero sin ningún compromiso de oposición y enfrentamiento. El único y necesario plan de formación para la seguridad nuclear que la población necesita es el plan de cierre inmediato, y la mejor ínformación y divulgación relacionada con la seguridad nuclear es la concienciación de todo el riesgo que entrañan estas centrales y especialmente la vetusta de Garoña Defender este tipo de energía o al gobierno del PP que lo sustenta, supone ser corresponsable de esta situación. No hay “infalibilidad” de las nucleares como ha sido rebatido con los hechos, dramáticos con décadas de padecimientos en las poblacioens que los padecen, sin remedio, lo que debería ser un aviso para aplicar el principio de precaución y seguridad. El riesgo es inasumible para una población concienciada y en riesgo de un accidente nuclear. Tanto Fukushima-1 como Garoña tienen unos reactores con un pésimo sistema de contención y por ello podemos calificar a Garoña como un peligro de primer orden, sin medidas de prevención, evacuación, ni contención en caso de accidente nuclear, indesable pero posible según la experiencia y sus características. Este acatamiento a la ley del poderoso dueño de Garoña por parte dell PP es una actuación irresponsable que desautoriza su discurso sobre la seguridad, como si no se pudiera repetir la historia y no debíesemos de haber conocido accidentes en las nucleares de Three Mile Island; Chernobyl; Fukushima-Daiichi, y Marcoule. Para Eguzki, Garoña es una planta nuclear que debería haber estado cerrada hace mucho tiempo por vieja, por peligrosa, por innecesaria, por estar amortizada, porque lo demanda la sociedad, no adminitiendo imposiciones al respecto. No hay criterios económicos, ecológicos ni democráticos que avalen el funcionamiento la energía nuclear. Por lo tanto, es la sociedad vasca la que exige al Gobierno Español que atienda a la demanda netamente mayoritaria cierre Garoña de forma inmediata, y dentro de la formación e información de la población se garantice con el cierre de Garoña el fin del riesgo para la población que se pretende informar y formar con dichas ayudas publicadas por el BOE .