La Diputación alavesa entra en el accionariado Ekienea, en vez de apostar por un modelo público y alternativo

El Consejo de Gobierno de Álava ha aprobado este martes la adquisición de 60 participaciones de la sociedad Ekienea, a través de la recientemente creada sociedad foral Enargi Araba SAU, institución que se ha hecho con el 2% de la compañía tras desembolsar 109.800 euros. Desde Eguzki vemos como se pierde una oportunidad para promover una empresa pública de generación de energía limpia, apostando por la colaboración público-privada entre entidades vascas, pero con un 2% de apoyo al negocio privado. Entre la apuesta por capitalizar empresas privadas, y un modelo completo energético público que promueva y garantice la producción renovable, se expone un modelo socio económico de visión del planeta, de los recusos, de la producción y consumo, al servicio del interés general o del capital privado. Ekienea ubicada en Armiñon, se extenderá a lo largo de más de 200 hectáreas, de las que 100 serán ocupadas por la planta fotovoltaica y las otras 100 por terreno destinado a compensación ambiental y preservación de zonas forestales. Con 135 megavatios (MWp) de potencia pico, esta gran instalación renovable generará energía limpia para satisfacer el consumo anual de unas 60.000 personas, y casi triplicará la actual capacidad de generación solar de la CAV, cercana a los 60 MW. Además, con su producción se evitará la emisión a la atmósfera de 25.000 toneladas de CO2 al año.