Concentración de EGUZKI exigiendo al PP el cierre INMEDIATO, DEFINITIVO E IRREVERSIBLE de GAROÑA

Concentración ante la orden de cierre de Garoña publicada en el BOE hoy, dado que el Real Decreto que ha presentado el PP para el tratamiento de residuos nucleares en su Disposición Adicional permite que Garoña se reactive y su reapertura sine die. El Comunicado que hemos leido en la convocatoria dice así: Tras décadas de trabajo y denuncia contra la energía nuclear y, en particular, contra Garoña, se anuncia su cierre. No es la primera vez, pues se han dado promesas y diversos engaños y fraudes sociales en la prolongación de su funcionamiento.

Los últimos años se ha producido una clarificación de ideas: riesgos evidentes, accidentes en varias plantas y daños irreparables, provocando un debate mundial sobre la seguridad de las centrales nucleares. Tras los accidentes de Chernobil, y Fuckushima, producido tres días después de que la Fundación FAES de Aznar garantizase de forma absoluta la seguridad de la energía nuclear, no caben engaños sobre los riegos de la energía nuclear, más si cabe en el caso de una planta vieja y obsoleta como es Garoña.

Pero esta vez no es una promesa, sino al contrario. El Gobierno español ha mostrado tanto su cara pro nuclear como ha regulado mediante una norma que permite que todas las centrales nucleares del Estado sigan funcionando sine die, incluida Garoña,.

La UE ha realizado inspecciones a las centrales del Estado, quedándose al margen por “casualidad” la más vieja y denunciada por sus peligros, Garoña. Tras los exámenes de Doel, la Agencia Belga y la empresa productora de esta serie de reactores, se reconoce un peligro real en el caso de Garoña, por ser del mismo fabricante y la misma tecnología.

La clave esta en las obligaciones del europeas que imponen a Garoña unas condiciones para continuar funcionando que entrañan grandes inversiones, a la luz de los riesgos reales, evidentes y graves que llevan a exigir esas medidas. Solo los requerimientos de seguridad suponen una intervención “antieconómica” para la usura de Nuclenor, y quizás imposible, pues al afectar al reactor, no cabe reparación posible y el riesgo se perpetúa mientras esta funcionando. Por lo tanto, si hay riesgo, si la inversión es inasumible o inaplicable, se debe cerrar la puerta al peligro que entraña, idéntico al de hace unos meses y al de los próximos meses si se produjese la reapertura.

Eguzki plantea la necesidad de que se ofrezca información completa y veraz, se traslade a la sociedad el estado de la planta y pueda conocer los riesgos, para garantizar su cierre y poner punto final a su historia de forma controlada.

Garoña se debe paralizar de forma inmediata, definitiva e irreversible, pues la mejor medida de seguridad posible para la población del entorno, es el desmantelamiento total de las instalaciones. Por ello, hoy como siempre, seguimos reclamando GAROÑA ITXI ORAIN ETA BETIRAKO.

Eguzki talde ekologista En Gasteiz, a 10 de julio de 2013.