En el día de ayer, supimos que un informe aconseja «eliminar» 66 árboles de la Senda, el Prado, la Florida y otros parques. Según los datos presentados por el experto arborista, sólo el 10,7% de esos árboles estudiados se deben conservar. Insta a eliminar 66 de esos 113, mientras con nueve de ellos opta por la solución de eliminar o someter a un rebaje drástico y para otros cuatro recomienda también eliminar algún ejemplar de los analizados.
En La Florida, de los 32 árboles estudiados, se concluye que es necesario eliminar 17, mientras hay que acometer algún tipo de rebaje en siete de ellos. Únicamente se estima necesario conservar una cuarta parte de ellos, con lo que 8 de los estudiados podrán continuar con su función ornamental. La zona del paseo universitario requiere (según esta propuesta) de una intensa actuación con más del 50% de los árboles a eliminar. De los 56 sometidos a diagnóstico, recomienda eliminar, nada menos que 34. El rebaje drástico debe ser efectuado sobre 18 de ellos, según tales intenciones, mientras tan sólo dos merece la pena conservar, según los datos del experto arborista. Se hacía público que ya ha comenzado la poda de los ejemplares para evitar riesgos durante episodios de tormentas.
Dada la “gravedad” de la situación se ha establecido un protocolo mediante el cual, en caso de vientos fuertes en las jornadas venideras, se van a “balizar las zonas para impedir el paso de los viandantes” y mientras tanto empezar a ejecutar los trabajos de disminución de riesgo. Evidentemente, una medida necesaria como cortar carreteras costeras o cerrar el paseo donostiarra, temporal y loable, que no supone sino seguridad sin que ello suponga otra medida que reducir riesgos cuando se generan.
Tenemos que recordar que los últimos años ha sido un recordatorio del desprecio hacia los árboles y su supeditación hacia toda obra que se pretenda ejecutar: decenas de árboles talados en la plaza Santa María luego en Sancho el Sabio para facilitar el trazado del tranvía, en Teresa de Calcuta, Esmaltaciones, Avenida, plaza Lovaina , Barratxi, Alí Gobeo, etc., etc. Una evolución a talar de forma constante, masiva y paulatina en zonas bajo argumentos de seguridad y necesidad que no han sido informados ni justificados socialmente.
Toda una demostración de que la motosierra y la tala del Gobierno municipal se aplica con trabajadores y con los árboles, eliminando lo que no le gusta, mostrando total insensibilidad, compromiso social y medio ambiental
Desde Eguzki vemos con asombro que para evitar riesgos se realizan talas preventivas y muerto el perro se acabó la rabia. ¿Pero riesgo, a quién, personas, mobiliario o a los propios árboles?, no hay riesgo real durante la tormenta salvo alguna rama caída, algún árbol que dependiendo la intensidad acabe en el suelo, pero ello no justifica quitar un árbol .
Los coches conducidos a cierta velocidad pueden contribuir a muerte por atropello y no se prohíben, las farolas pueden causar el mismo efecto que un árbol, pero en elemento molesto, que supone riesgo y molesta en esta nuestra Green capital es el árbol.
A juicio de Eguzki es una muestra de insensibilidad, de prioridades en talar por talar para no tener una rama, riesgo natural ni vida con naturaleza. El gris de la Virgen Blanca es la expresión de una Green con musgo de postal, turisteo y poco real.
Las talas masivas y constantes suponen una excusa para hacer una ciudad verde sin conciencia ambiental, por parte de un Ayuntamiento que pone el foco en quitar problemas mediante la eliminación de talas, sin saber gestionar el riesgo de una tormenta, cuando en todo el mundo hay árboles, tormentas y un riesgo natural sin que por ello se precise talar 66 árboles en Vitoria - Gasteiz ni todo el Amazonas eliminando el riesgo ante nuestra casual visita por su entorno en caso de tormenta. ¿Exageración? Como la tala y ajusticiamiento de los árboles ante el riesgo de tormenta.
El Ayuntamiento pedirá más exámenes, pero damos por hecho que serán con el mismo criterio que se viene teniendo pro tala en toda la ciudad, favorable a cualquier intervención de ciudad que requiera la tala.
En esta ciudad hay muchas talas y no se conoce informes que eviten las mismas, sino que los permitan y justifiquen siempre y en todo caso Es otro ejemplo de los representantes institucionales, que se abanderan como adalides de la ecología y la participación, pero cortan por lo sano en una calle donde no encontramos motivos para eliminar su identidad
Desde Eguzki aconsejamos al ayuntamiento a que ponga en práctica su discurso de participación para acompañar en un proceso de mejora de seguridad previa información a vecinos y vecinas, para realizar un proceso de mejora en el arbolado de la zona y revalorización del arbolado de la ciudad, sin talas masivas y con tan poco fundamento, para posteriormente proceder a una plantación popular y revalorización de la masa arbórea urbana.
Por ello Eguzki de Gasteiz denuncia este anuncio de tala indiscriminada y grita basta ya.
sábado, 24 de junio de 2017
Eguzki denuncia el anuncio de tala masiva por parte del Ayuntamiento
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